La Escuela de Protección Ciudadana de Castilla-La Mancha ha llevado a cabo un importante curso de reciclaje formativo dirigido a los integrantes de cuerpos de Policía Local que pertenecen a la XXXV promoción del Curso de Formación Inicial para Policía Local, realizado en 2003. Este curso, centrado en técnicas de reanimación cardiopulmonar (RCP) y el uso del desfibrilador automático (DEA), se considera esencial para garantizar una adecuada respuesta ante situaciones sanitarias críticas.
El director general de Protección Ciudadana, Emilio Puig, estuvo presente en la jornada inaugural del curso, donde destacó la importancia de que los miembros de los equipos de emergencia, especialmente los policías locales, cuenten con los conocimientos necesarios para gestionar situaciones de emergencia. “El contacto diario con los ciudadanos exige una preparación adecuada ante cualquier eventualidad”, afirmó Puig.
Cuarenta y un alumnos han participado en esta capacitación orientada a la medicina de urgencias. Su objetivo ha sido repasar y practicar habilidades esenciales para la resucitación cardiopulmonar en casos de infarto, además de manejar el desfibrilador automático. La formación se realizó en dos jornadas consecutivas por técnicos de Cruz Roja de Castilla-La Mancha, en el marco de un convenio de colaboración con la Consejería de Hacienda.
Durante el curso, los participantes profundizaron en el reconocimiento de la parada cardiorrespiratoria y practicaron el manejo de distintas situaciones, asumiendo roles de líder y acompañante. También recibieron instrucción práctica sobre la gestión de la vía aérea y el uso del DEA, tanto de manera individual como en equipos.
Los alumnos provienen de diversos ayuntamientos de la provincia de Albacete, como Munera y Hellín, así como de localidades de Ciudad Real como Argamasilla de Alba, Puertollano y Tomelloso. También participan representantes de Mota del Cuervo en Cuenca, del Consistorio de Guadalajara y de varios municipios toledanos, entre ellos Fuensalida, Mocejón y Talavera de la Reina. Este esfuerzo formativo busca fortalecer la capacidad de respuesta ante emergencias, contribuyendo así a la seguridad y bienestar de la comunidad.