Un histórico de la Policía Local de Gijón, Francisco Rico Gil, falleció el domingo pasado a los 67 años, tras una enfermedad que le fue detectada hace unos meses y a la que plantó cara con la entereza que siempre le caracterizó. Fue un policía querido y apreciado por sus compañeros, con gran carisma, un gran profesional y mejor persona.
Se jubiló hace poco más de un año y lo hizo por obligación. La despedida que entonces le hicieron sus compañeros fue de las que hacen época y a ella asistió emocionada la alcaldesa Carmen Moriyón, ya que Rico fue su escolta durante años en la anterior etapa en la alcaldía.
Su despedida fue ayer lunes, 9 de septiembre, a las 5 de la tarde en el tanatorio de Jove. Que la tierra te sea leve, compañero.