Josep Ramon Ibarz Almenara, Intendent Cap de la Guàrdia Urbana de Lleida
Digo hasta pronto porque no puedo ni quiero deciros adiós. No tengo la sensación de irme, en absoluto. Sóis parte de mi, mi otra familia. Hace dieciocho años que asumí el cargo de intendente jefe de la Guardia Urbana de Lleida. De la mano de Josep Palouzié, Xavier Vilaró y Conrado Fernández entré en Unijepol. Ellos fueron mis padrinos, mis “conselleres” en un mundo nuevo para mi, la Policía Local. Por aquel entonces conocí a Pepe Cano y a otros muchos compañeros. Me sentí a gusto, acogido, protegido y con el apoyo sincero de grandes expertos en un campo desconocido para mi.
Yo venía de los Mossos d’Esquadra, donde había desarrollado funciones en las especialidades de policía judicial y de seguridad ciudadana. Aquí descubrí la policía de proximidad -la auténtica- amén de la seguridad vial urbana. En eso somos originales, los más cercanos a nuestros ciudadanos, la primera línea de fuego. También aprendí que todos los jefes de Policía Local “mueren” por la proximidad al político y al ciudadano.
Trabajando en equipo hemos construido una Guardia Urbana moderna y competitiva, de la que me siento especialmente orgulloso. Hoy por hoy, somos un referente en materia de seguridad en nuestra ciudad. De hecho, es inconcebible hablar de seguridad en cualquier población de España sin tener muy presentes a las Policías Locales.
A partir del 1 de julio, a mis 62 años y tras 35 en la policía y 44 en la función pública, pasaré a ocupar el cargo de director de los Servicios Territoriales de Interior en Lleida, desde donde estaré a vuestra entera disposición, siempre.
Ha sido un verdadero honor servir a nuestros ciudadanos desde la Guardia Urbana, así como formar parte de la gran familia de Unijepol. Eternamente agradecido por vuestro acogimiento, apoyo y comprensión.
Recibid un fortísimo abrazo.