El Ayuntamiento de Logroño apuesta por reforzar la seguridad en la ciudad con la instalación de 51 cámaras de videovigilancia. Esta medida, inspirada en modelos ya utilizados en otras ciudades, tiene como objetivo prevenir tanto actos incívicos como comportamientos delictivos.
El plan contempla un primer paquete de 21 cámaras inteligentes, financiadas con fondos europeos, y una segunda fase con 30 cámaras adicionales que serán costeadas con presupuesto municipal. La instalación de este segundo grupo se realizará en el último trimestre del año y se centrará especialmente en el Casco Antiguo de la capital riojana.
La Junta de Gobierno Local ha aprobado el contrato para el desarrollo de un gemelo digital de cámaras inteligentes, con una inversión de 412.545,28 euros. Este sistema permitirá integrar las cámaras urbanas ya existentes con las nuevas, así como crear simulaciones preventivas a través de inteligencia artificial.
Fechas y contexto de implantación
Las primeras cámaras estarán instaladas a finales de noviembre y el sistema completo estará operativo antes del 31 de diciembre, según la nota de prensa municipal. Esta iniciativa se integra en el proyecto Retech de Gemelos Digitales, cuyo fin es mejorar la gestión de los servicios públicos mediante inteligencia artificial.
La necesidad de dotar a Logroño con una red de videovigilancia llevaba tiempo en estudio. Desde 2024, se planteó la instalación de cámaras en el Casco Antiguo, trabajando en coordinación con la Policía Local. Además, proyectos previos, como el de modernización tecnológica comercial con IA y robótica, ya incluían la implantación de 50 cámaras en puntos estratégicos de la zona más castigada de la ciudad, enfocándose en la mejora de la seguridad ciudadana y en el control de flujos de turistas y viandantes mediante análisis de imagen.
















