La creación de puestos adaptados para los miembros de los Servicios Policiales que resulten con discapacidad (como consecuencia de actos de servicio o por cualquier otra razón) para la prestación de servicios operativos es una cuestión pendiente para el legislativo y para los responsables de las diferentes Administraciones Públicas de las que dependen respectivamente los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad.
En la Policía del siglo XXI, que se pretende inclusiva, deben buscarse fórmulas que permitan el mantenimiento de estos profesionales en el servicio activo, a través de la definición de “puestos adaptados”, como ya se hace en las Policías Locales con los puestos de segunda actividad. No tiene sentido mandar a la jubilación a profesionales -jóvenes en muchos casos- que todavía pueden aportar mucho a la profesión y al servicio público .
En este sentido, la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUG) defiende que “la adaptación de la Guardia Civil a la sociedad y a las necesidades de sus miembros requiere dar pasos como el que estamos reivindicando, que no es otro que la adecuación del entorno laboral a las características de las guardias civiles con discapacidad, teniendo en cuenta sus habilidades y limitaciones”.
En un vídeo difundido por Raquel Morcillo, que reproducimos al final de este artículo, la esposa de Jacobo expresa la demanda de su marido para continuar contribuyendo activamente a la sociedad y a la institución de la Guardia Civil a través de un puesto de trabajo adaptado a su situación de discapacidad. En sus propias palabras, ha destacado la importancia de mantenerse activo y de seguir aportando desde su experiencia y capacidad, a pesar de los desafíos personales a los que se enfrenta.