Isabel García Fernández
El agente Benito Souto Calviño, del equipo de Atestados de la Jefatura de Policía Local de Vigo, es uno de los mayores expertos en España en estos vehículos, cuyo uso sigue generando numerosas dudas. Los informes periciales de este policía han servido para apoyar sentencias del Supremo como la relacionada con un falso VMP localizado en Alcalá de Henares. Calviño ve imprescindible llevar a los colegios e institutos campañas de información y sensibilización.
Los Vehículos de Movilidad Personal (VMP), por muchos conocidos como patinetes eléctricos, aunque éste sería solo uno de sus múltiples formatos, son más que una realidad con la que hay que convivir, principalmente en las ciudades, que son los feudos de las policías locales. Por eso, su casuística y su evolución irá de la mano de lo que experimenten los agentes locales de España, que son quienes han de lidiar con una problemática aún pendiente de una más extensa regulación. Controlarlos recae en la capacidad de los ayuntamientos, no en la Jefatura Provincial de Tráfico. Por eso serán los agentes de cada localidad los que marquen el ritmo en su ordenación.
Uno de los mayores expertos estatales en este ámbito es el policía de la Unidad de Atestados de Vigo, Benito Souto Calviño. Su asesoramiento en la materia le ha valido, entre otros logros, ver refutados sus informes periciales al respecto en sentencias judiciales en el Tribunal Supremo. Así, policías locales de Alcalá den Henares (Madrid) solicitaron un modelo de informe técnico al encontrarse con un falso VMP, con formato estilo Citycoco, que en realidad se trataba de un ciclomotor, L1eB, para el que su conductor carecía de permiso. “También somos en este sentido policía judicial y podemos detectar estafas en la comercialización de estos aparatos, si vemos que se están vendiendo falsos VMP”, añade.
Él propone emprender campañas informativas contundentes, sobre todo en colegios e institutos, para prevenir e informar de los riesgos y de las normas de seguridad en la vía con el uso de estos aparatos. Ha tenido la amabilidad de contestar a la entrevista de SeguCITY.
SeguCITY: ¿Cuáles son los principales problemas con los que se enfrentan los policías respecto a los Vehículos de Movilidad Personal (VMP)?
Respuesta: Para empezar, los derivados del propio aparato que muchas veces carece de una identificación completa. Pese a que la normativa actual contempla que han de ser vendidos con un certificado de circulación y una chapa con el marcaje de VMP, número de serie y las características técnicas, por el periodo de transición y adaptación existente, muchos de ellos no las llevan. Además, es relativamente fácil manipularlos, ya que tales distintivos se suelen colocar en lugares que no son el motor, como por ejemplo en el bastidor, por lo que éste puede modificarse. Es decir, es cierto que pasamos de la presencia de unas pegatinas para el control industrial de la Comunidad Europea, a un certificado de circulación, pero se dan problemas de manipulación del aparato, como sucedió en otros tiempos con vehículos como las Vespino, con el ánimo de adquirir más potencia o velocidad. El ‘quid’ de la cuestión es saber detectar las manipulaciones.
SeguCITY: ¿En ese sentido, el principal indicio de manipulación sería el sobrepasar la velocidad permitida para ellos, de 25 kilómetros por hora?
Respuesta: Si superan esa velocidad claramente estamos ante un indicio de manipulación y podemos comprobarlo si lo seguimos y con el cuentakilómetros del coche patrulla vemos que pasa de esa velocidad, de hecho es la forma más aconsejable de probarlo en los boletines de denuncia, tal y como recoge la Instrucción de VMP de 2019. Pero también se puede detener el vehículo y levantar su rueda tractora, activar el acelerador y ver qué velocidad alcanzaría; se podría ver de esta manera en parado y detectar si está activa la limitación electrónica. La velocidad es indispensable para calificarlo como VMP. Fuera de eso estaríamos ante un artefacto no apto para la circulación. Hay que recordar que el VMP tiene una sola plaza, motor eléctrico y está limitado a 25 kilómetros por hora. Si detectamos un falso VMP, entonces estamos ante un artefacto que carece de autorización para circular y ésta es una de las causas previstas para su inmovilización.
SeguCITY: Por ahora no tienen la obligación de suscribir un seguro, pese al elevado número de accidentes en el que se están viendo involucrados. ¿A pesar de ello, se están contratando seguros por parte de los conductores de VMP?
Respuesta: Cada vez es más habitual que sus titulares suscriban un seguro, porque además las cuotas son nimias. Si se contrata un seguro solo para el VMP, el coste ronda los 50 euros al año y también hay muchos seguros del hogar en los que se puede incluir. Teniendo en cuenta el elevado riesgo de atropello que presentan, es sumamente útil disponer de un seguro.
SeguCITY: Son muchos los agentes que aún no tienen claro por qué lugares deben circular los VMP, ¿es así?
Respuesta: Sí, se sigue viendo cómo circulan por las aceras, paseos o carriles-bici, cuando son vehículos y como tales deben circular por la calzada. Se podría pensar en él casi como en una bicicleta. Pero se da la problemática de que circulan casi por cualquier parte, al ser estrechos, ágiles y potentes. Son tan versátiles que se abusa de ellos.
SeguCITY: ¿Por lo demás, en qué tipo de infracciones incurren estos aparatos?
Respuesta: En las habituales de tráfico, sobre todo se ve cómo muchos de sus conductores los pilotan con cascos puestos, por la acera o lugares de paso exclusivo para peatones, se saltan semáforos, va más de uno subido al VMP, es decir, el conductor incurre en infracciones propias del conductor de cualquier vehículo.
SeguCITY: ¿Cómo ayudan las ordenanzas a paliar su problemática?
Respuesta: Las ordenanzas establecen obligaciones que no estarían del todo amparadas en la Ley de Seguridad Vial. Pese a que en muchas localidades, como en la de Vigo, la ordenanza sobre VMP es de plena aplicación, con obligaciones como la del uso de casco, pero es cierto que se trata de una medida a la que no obliga el Reglamento General de la Circulación. Pasa igual al regular obligaciones como la de la edad a la que se permite su conducción.
Habría que regular de forma estatal, porque con distintas ordenanzas nos podríamos encontrar con el ilógico de que en un ayuntamiento sancionan por algo que en el municipio de al lado no. Por ejemplo, con respecto al casco habría que regular el tipo a utilizar y en qué condiciones. De hecho, me envían ordenanzas de distintos ayuntamientos para que asesore y veo que en algunas exigen incluso el casco homologado y no el certificado, lo que me parece exigente, porque es el propio de una motocicleta, un casco que no lleva siquiera un ciclista aunque circule a 45 kilómetros por hora. Los patinetes fabricados antes de la entrada en vigor del Manual de Características, tampoco es obligatorio que lleven luces, ya que no se han incorporado al Anexo X del Reglamento de Vehículos, pero si el conductor no lleva al menos una prenda reflectante por la noche, se le podría sancionar por conducción negligente.
SeguCITY: ¿Sería útil que cada Ayuntamiento dispusiera de un registro o base de datos de VMP?
Respuesta: Sí, pero tampoco la hay de las bicicletas. Además, al costar menos que una bici, ya que prácticamente se regalan en las ferias, están proliferando.
SeguCITY: Lleva usted 20 años ejerciendo como policía, ¿qué tipo de artefactos extraños ha visto circular?
Respuesta: He visto desde tenis con motor, hasta supuestos vehículos para personas con movilidad reducida con capotas hechas a medida, como uno que me envió una vez un compañero de Padrón, que había visto un vehículo así con dos asientos y carrozado; parecía un cuadriciclo. Hay que recordar la literalidad de que los denominados vehículos de movilidad reducida deben estar matriculados y pueden alcanzar los 45 kilómetros por hora.
SeguCITY: ¿Y cuáles son las conductas sobre el uso de VMP que ve urgente corregir?
Respuesta: No se está inculcando una cultura de la seguridad vial al respecto, como sí hacían antes los padres con las bicicletas, diciéndoles a los hijos que se pusieran reflectantes o previniendo por dónde deberían circular. No se están transmitiendo esos valores con el VMP. He visto a padres ir a recoger a sus hijos a la salida del colegio e ir el padre y el hijo en el VMP por cuestas muy empinadas de Vigo, donde es difícil frenar, con el riesgo que conlleva.