Federico Gómez Sáez, secretario de Políticas de Bienestar Salud Laboral de Unijepol
En días pasados, SeguCITY digital informaba del acuerdo suscrito entre la Dirección General de la Policía y la Dirección General de Protección Ciudadana de Castilla La Mancha, para que funcionarios de la Policía Nacional impartieran formación a las Policías Locales en materia de prevención de riesgos laborales: Castilla-La Mancha y la Dirección General de la Policía promoverán la formación en prevención de riesgos laborales a las Policías Locales, a pesar de disponer de marcos de regulación laboral muy diferenciados | SeguCITY Digital
Este acuerdo llamó mucho la atención en las Policías Locales, ya que no se alcanzaba a comprender ni su intención, ni su sentido, cuando las Policías Locales disponen de un marco normativo (legal y a través de los acuerdos laborales suscritos entre los ayuntamientos y la representación sindical) mucho más avanzado que el existente en la Policía Nacional.
Tanto es así, que fuentes sindicales de Castilla La Mancha no dudaron en achacar la existencia de este acuerdo por la condición de miembro de la Policía Nacional del Director General de Protección Ciudadana y no por el interés municipal y de las Policías Locales.
El Manual de Buenas Prácticas en Salud y Bienestar Policial
Además, se da la circunstancia que miembros de las Policías Locales de toda España, y entre ellos de Castilla-La Mancha son los principales autores del conocido y reconocido Manual de Buenas Prácticas en Salud y Bienestar Policial, que cuenta con el apoyo de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), de diversas Comunidades Autónomas y de la Mutua Asepeyo.
La Dirección General de Protección Ciudadana de Castilla La Mancha, no solo no aprovecha el trabajo realizado, sino que lo desprecia, y desperdicia recursos públicos de esa Comunidad Autónoma en un convenio que no tendrá ningún beneficio para las Policías Locales de la región.
En el Manual de Buenas Prácticas en Salud y Bienestar Policial trabajaron un equipo compuesto por 12 autores, pertenecientes a diferentes Cuerpos de Policía Local de toda España, que aglutinaron en su formación a 7 psicólogos, 2 médicos, 7 mandos de las Policiales Locales, 1 filósofo, 2 abogados, 3 escritores, 3 profesores universitarios, 5 profesores de escuelas de policía, 2 técnicos de emergencias y varios prevencionistas.
El manual está estructurado en tres partes: Aspectos teóricos, Estrategias prácticas y Anexos sinérgicos. Del mismo se destaca su objetivo de contribuir a favorecer Salud Mental para el Bienestar Policial, aunando su contenido teórico con estrategias prácticas para lograrlo. Con el valor añadido de ayudar a las organizaciones y a sus responsables a tener a profesionales sanos, beneficiándose del estado óptimo del policía y de la propia ciudadanía a la que sirve. Y por supuesto tratando la Prevención de Riesgos Laborales, por policías locales psicólogos, en un capitulo de excelente calidad. Tanto es así, que el antiguo inspector jefe de Prevención de Riesgos laborales del Cuerpo Nacional de Policía, Ricardo Torrecilla, y ahora director general de Recursos Humanos del Ayuntamiento de Alcorcón (Madrid), validó dicho manual. Exactamente lo contrario que se está haciendo en Castilla-La Mancha.
¿Quién protege a los que protegemos?
Son muchos los jefes y mandos de los Cuerpos de Policía Local que, durante muchas décadas, se han preocupado y han tenido entre sus prioridades introducir protocolos y buenas prácticas destinadas a la seguridad y protección de los funcionarios de las Policías Localoes.
Probablemente se ha trabajado más desde la voluntad, sin los métodos y medidas suficientes, y siempre con un gran esfuerzo. La Unión Nacional de Jefes y Directivos de Policía Local (Unijepol) como asociación nacional que representa y defiende los intereses de la Policía Local, está plenamente convencida del importante papel que tienen los representantes políticos y técnicos de los Ayuntamientos, y compartimos un mismo objetivo: Facilitar la investigación, extraer sus acciones prácticas y apostar decididamente por la incorporación de estrategias protectoras de la integridad y salud de mujeres y hombres que, en el ejercicio de sus funciones, la exponen frecuentemente. Este y no otro es el motivo por el que existe la Secretaría de Salud y Bienestar Profesional en Unijepol.
Ya llevamos tiempo pensando que también es necesario “cuidar a los que nos cuidan y protegen”. Nos consta que grandes sindicatos, como CC.OO. y UGT han elaborado Guías de prevención de riesgos laborales para la Policías Locales, que complementan nuestro manual.
Hoy nos vemos obligados a destacar que la única excepción en este panorama de consenso en nuestro colectivo profesional ha sido la Dirección General de Protección Ciudadana de Castilla La Mancha: ¡que triste!
















