La comisión para «analizar y evaluar la gestión y el funcionamiento de la Policía Local» de Alicante se celebró este jueves, con la comparecencia del jefe del cuerpo, José María Conesa. El comisario ha participado voluntariamente en la cita tras remitir un informe de casi 500 páginas.
Conesa declinó realizar ninguna exposición inicial, por lo que la reunión se inició directamente dando paso al turno de preguntas de los grupos municipales.
Preguntas socialistas
Por parte del PSOE, Miguel Castelló ha preguntado si la reorganización impulsada recientemente ha sido «eficaz». «No es algo de sí o no, lo estamos consiguiendo en un determinado porcentaje», explicó el jefe de la Policía Local.
Por lo que respecta al personal, Conesa ha lamentado que «falta gente, porque se han ido jubilando». Sobre el número de agentes de los que dispone Alicante, el comisario ha señalado que «lo de la ratio por habitante no es algo a lo que la ley te obligue, sino que son consejos que se dan», sin embargo, ha reconocido que la ciudad «está por debajo de Elche, por ejemplo».
El concejal socialista ha proseguido con su turno de «interrogatorio», consultando en qué se traduce esa falta de agentes: «Hay una merma de policías y eso afecta en los servicios, es evidente. Si la ciudad crece y nosotros tenemos la misma plantilla hace 15 años, pues hay servicios a los que no se llega. El gobierno municipal lleva años limitando la incorporación de miembros».
Preguntas de Vox
Por parte de Vox, el portavoz adjunto, Mario Ortolá, ha puesto el foco sobre los vehículos de la Policía. En concreto, ha afirmado que dos coches se encuentran catalogados como «particulares», algo que Conesa atribuyó a un «error». Después, el edil le ha preguntado si hay algún vehículo operativo pese a contar con la ITV desfavorable. El jefe de la policía, aunque aseguró desconocer la situación de todos los vehículos, señaló que «la revisión la pasan los talleres municipales y, si resulta desfavorable, ese vehículo no se nos devuelve hasta que se repara».
Respecto al estado general de los vehículos del cuerpo, el comisario ha reconocido la necesidad urgente de mejoras: «Me da vergüenza que nos vean con el estado en el que están los vehículos, mentiría si le dijera que estoy orgulloso de eso, pero he aprendido a trabajar con lo que hay»,afirmó.
Tras ello, Vox cuestionó el estado de las pistolas eléctricas «Taser», que según testimonios de agentes habría menos unidades operativas de las contempladas en la documentación de la comisión. «No lo sé», contestó Conesa. Además, Ortolá preguntó si se utilizan chalecos antibalas con fechas de caducidad ya cumplidas: «Que yo sepa no, es posible que a lo mejor alguien tenga un chaleco pero no lo use porque su puesto no lo requiere. Los chalecos antiguos se utilizan para las prácticas de tiro», replicó Conesa. Por último, Vox preguntó si se consideran «suficientes» los cartuchos que se emplean en las prácticas: «Me gustaría tirar más, somos la única policía en toda la provincia que no tiene galería de tiro, tenemos que alquilar la de tiro olímpico y este año creo que no hay presupuesto».
Preguntas de Compromís
En el turno de Compromís. Su portavoz, Rafa Mas, preguntó también sobre la falta de chalecos antibalas: «Hoy toman posesión 16 agentes y ahora mismo no tengo para darles un chaleco», señaló el comisario.
A continuación, Mas acusó a Conesa de «lavarse las manos» con el contrato de vestuario, a lo que el jefe de la Policía ha interrumpido al concejal: «No, eso lo dice usted, yo no me lavo las manos con nada», ha replicado. Al respecto, el concejal de contratación y presidente de la comisión, Manuel Villar, ha avanzado que la nueva adjudicación ya ha superado la fase de clasificación de ofertas y que, dado que solo se ha presentado una empresa, su tramitación se prevé rápida.
El turno de Mas ha sido, sin duda alguna, el más tenso de la cita. «Si me permite la expresión, eso es un auténtico disparate, a usted le han contado una película…», ha llegado a recriminarle el jefe del cuerpo al concejal de Compromís, que ha intentado (sin éxito) poner en boca de Conesa distintas afirmaciones de la formación progresista: «Termina todas las preguntas diciéndome si soy consciente de cosas que no son ciertas», ha lamentado el comisario.
Un momento distendido
El momento más distendido del encuentro lo protagonizó el propio Conesa, al ser preguntado por la estructura de mandos: «Si yo me jubilara, que creo que no lo haré…» manifestó el comisario, lo que ha despertó risas entre los presentes, ya que el Gobierno Municipal ya ha anunciado que se jubilará obligatoriamente, en contra del criterio del propio Conesa.
“Era un toque cómico, tipo Rajoy», indicó. Tras ello, ha advertido de la falta de mandos: «Cuando yo me vaya, habrá un comisario por mejora de empleo, mientras que cuando llegué éramos cinco comisarios».
Compromís ha preguntado también cuántas llamadas al 112 quedan sin atender (6.000 al año, según la formación) y si esas peticiones de ayuda quedan o no registradas: «No existe posibilidad de que entre una llamada del 112 y no figure en el sistema, precisamente gracias a ello sabemos cuántas llamadas no se atienden, aunque la cifra que ha dado es bastante inexacta. Todos los cuerpos tenemos llamadas que no se pueden atender», ha contestado Conesa, quien ha aclarado que el sistema da por «no antendidas» aquellas llamadas en las que no se anota quién se encarga de la atención: «¿Por qué no se anota? Porque vamos saturados. Pero no hay ninguna llamada importante, de seguridad ciudadana, de maltrato o de peticiones urgentes que se dejen sin atender».
Preguntas de Podemos
En último lugar intervino el portavoz de EU-Podemos, Manolo Copé, que lamentó la escasez de medios y de mandos. «Los datos que doy son objetivos, si tendríamos que ser 18 y somos 8…», ha sostenido Conesa. Del mismo modo, Copé ha incidido en el alto nivel de absentismo, con más de 17.000 jornadas de baja laboral el pasado año: «Es normal que en la Policía haya más bajas, suceden accidentes y somos muchos. Además, nosotros no conocemos realmente los motivos de las bajas, eso lo determinan los servicios médicos».
El portavoz de EU-Podemos también lamentó la falta de atención psicológica a los agentes con «síndrome de burnout» (desgaste profesional) y ha criticado la ausencia de una adecuada planificación: «No podemos planificar más allá de un mes con certeza absoluta, porque a veces los eventos llegan con escaso margen y tenemos que rediseñar la planificación que tenemos», ha argumentado Conesa. Por último, Copé se ha interesado por saber si existe un protocolo de actuación contra delitos de odio: «Protocolo como tal no, pero sí que existe una formación específica que han recibido agentes de la unidad de violencia de género».
Respecto a la polémica por las multas a entidades sociales que reparten alimentos, Conesa ha descartado que exista una «persecución». «A lo mejor esos vehículos se pusieron a repartir comida en algún lugar que no era el adecuado y dificultaba el paso de los vehículos, pero ya le digo que no hay ninguna indicación, yo no trasladaría nunca una persecución a nadie y menos a una ONG», indicó Conesa.
