Dos patrullas de la Policía Local de Vilagarcía estaban interviniendo en un accidente de tráfico, cuando otro vehículo que circulaba por la vía, choca con el coche policial que se encontraba señalizando la zona. Ambos accidentes se saldaron sin lesiones en las personas, pero sometidos los conductores al control de alcoholemia, el del vehículo que colisionó contra el patrulla policial, arroja un resultado positivo.
En la madrugada del pasado fin de semana se produjo un accidente de tráfico en la zona urbana de Carril, ayuntamiento de Vilagarcía de Arousa (municipio de más de 37.000 habitantes de la provincia de Pontevedra), cuando una conductora pierde el control de su vehículo a la salida de una curva y choca contra una furgoneta estacionada en el margen de la vía.
Alertada la Policía Local, se desplazan al lugar dos patrullas, estacionando los vehículos policiales de forma visible para alertar de la obstaculización parcial de la calle, utilizando la iluminación estroboscópica habitual, mientras los agentes realizaban las labores también habituales de auxilio de la conductora y recogida de datos para esclarecer el hecho.
En ese momento circula un turismo Opel Astra por esa vía, en sentido centro ciudad, no percatándose su conductor de la presencia de los coches patrulla señalizando el accidente, por lo que no detiene su vehículo y choca contra uno de los vehículos policiales, si bien, no se produjeron lesiones personales pues los agentes no estaban en su interior.
Siguiendo el protocolo policial para la investigación de los accidentes de tráfico, se someten a los conductores de los vehículos implicados a las pruebas reglamentarias para detectar la presencia de alcohol que pueda influir en la conducción, resultando que la conductora implicada en el primer accidente dio resultado negativo de 0’0 mg/l de alcohol en aire espirado, mientras que el conductor implicado en el segundo accidente contra el coche patrulla, arrojó un resultado positivo de 0’50 mg/l.
Esta tasa de alcohol se considera una infracción administrativa a la normativa de tráfico y seguridad vial y conlleva una multa de 500 euros y la pérdida de 4 puntos del permiso de conducción, sin perjuicio de la responsabilidad a mayores derivada del propio accidente.