La Policía Local de A Coruña levantó 21 actas por posesión de drogas para consumo propio durante una inspección rutinaria en el establecimiento, que reabrió sus puertas recientemente.
La celebración de Halloween se alargó más de la cuenta en un local de ocio de Matogrande. El operativo, en el que participaron varias patrullas del 092, comenzó poco después de las ocho de la mañana. Los agentes accedieron al local, donde aún quedaban numerosos clientes prolongando la fiesta iniciada la noche anterior. Según fuentes policiales, la actuación se desarrolló sin incidentes, aunque con una elevada afluencia de público tanto dentro como en el exterior del pub.
Durante la inspección se identificó a todos los presentes, resultando 21 de ellos denunciados por tenencia de sustancias estupefacientes destinadas al autoconsumo. La cifra contrasta con la de otros controles previos en el mismo establecimiento: el último, en marzo, se saldó con siete actas y una multa administrativa.
Desde el local explicaron que aquella sanción fue abonada y que desde entonces reforzaron el control de aforo. Aseguran que el negocio no llegó a cerrar sus puertas y que actualmente cumple con las exigencias legales.
Fuentes municipales enmarcan la intervención dentro de las inspecciones preventivas que la Policía Local realiza de forma periódica en zonas de ocio de la ciudad. Solo unos días antes, un operativo similar en el bar La Tata, en el Orzán, terminó con dos actas por consumo propio de drogas.
Mientras tanto, los vecinos de Matogrande vuelven a mostrar su hartazgo. A través de Voces de A Coruña (Radiovoz), denuncian los continuos episodios de ruido, peleas y presencia policial en el entorno del pub, que consideran un foco de conflicto permanente.
















