El Ayuntamiento de Torrelodones ha llevado a cabo una importante ampliación de su red de cámaras de seguridad orientadas al control del tráfico. Esta acción representa un salto cualitativo en la gestión de la movilidad urbana y refuerza el compromiso del municipio hacia un modelo de ciudad inteligente. Se han instalado 35 dispositivos de última generación en puntos estratégicos, como cruces con alta incidencia de accidentes, zonas escolares, grandes avenidas y accesos al centro urbano, priorizando la seguridad vial en estos espacios.
La nueva red de cámaras supera las funcionalidades de los sistemas tradicionales al incorporar tecnología inteligente. Entre sus principales capacidades se encuentra la detección de tráfico en tiempo real, lo que contribuye a reducir las causas de siniestralidad. Además, estas cámaras monitorizan cruces y glorietas, permitiendo identificar vehículos que incumplen la señalización o que sufren incidencias mecánicas, situaciones de especial riesgo para peatones y ciclistas.
Otra función relevante es el control de matrículas en los accesos al municipio, lo que fortalece la seguridad local. La recopilación de datos anónimos acerca de la densidad y el flujo vehicular facilita a los gestores municipales la asignación eficiente de recursos y la prevención de congestiones en horas punta, optimizando así la movilidad y la seguridad vial para todos los ciudadanos.
Transparencia y protección de la privacidad
El principal objetivo de la instalación de estas cámaras es prevenir accidentes y proteger a los usuarios más vulnerables, especialmente escolares y peatones. Entre los beneficios esperados destacan la reducción de la siniestralidad vial gracias al efecto disuasorio de los dispositivos, una movilidad más fluida, una mayor protección en zonas críticas y la optimización de los recursos policiales, permitiendo que los agentes se centren en labores de control y educación vial más especializadas.
Previamente a la puesta en marcha de este sistema, se llevó a cabo una campaña informativa para comunicar la ubicación de las cámaras y se renovó la señalización vertical, asegurando que conductores y peatones comprendan que el objetivo es modificar comportamientos y no sancionar de forma sorpresiva. Todas las cámaras han sido calibradas para salvaguardar la intimidad y los datos personales mediante tecnologías de enmascaramiento en áreas residenciales, garantizando así una vigilancia ética y respetuosa con la privacidad de los habitantes de Torrelodones.
















