La Policía Local de Elda vuelve a demostrar que el compromiso con la comunidad no tiene fronteras. La agente Sonia S. Prada ha protagonizado una experiencia internacional que trasciende la formación lingüística o académica: una estancia Erasmus que ha servido para dar a conocer fuera de España la figura del Agente Tutor, una experiencia policial que se consolida como referente en materia de convivencia, prevención y acompañamiento a menores.
Su participación, enmarcada en un programa organizado por la Escuela Oficial de Idiomas de Xàtiva, la llevó a recorrer Viena, Bratislava y Budapest, tres capitales europeas que fueron escenario de intercambio, aprendizaje y reflexión sobre la función policial y educativa. Durante su estancia, Sonia tuvo la oportunidad de compartir su experiencia profesional en la Universidad Ludovika de Budapest, dentro del Campus de Law and Enforcement, donde expuso ante estudiantes y docentes su labor como Agente Tutora en los centros educativos de Elda.
Un modelo que despierta interés más allá de nuestras fronteras
El papel del Agente Tutor, aún poco conocido en otros países europeos, despertó gran interés entre los asistentes. Sonia explicó cómo este perfil policial —cada vez más reconocido en España— combina la prevención y la mediación con una atención directa y humana hacia los menores y sus familias.
“Les sorprendió la cercanía que mantenemos los policías locales con la ciudadanía, especialmente en el trabajo con la comunidad escolar”, relató Sonia tras su intervención. “El trato diario, el acompañamiento, la escucha… eso les resultó diferente, e incluso inspirador”. Entre los participantes húngaros, especialmente entre las mujeres policías, surgió una reflexión compartida: la necesidad de incorporar figuras similares en sus propios cuerpos de seguridad, más orientadas a la educación, la empatía y la prevención social.
Más allá de las aulas y los debates, esta experiencia significó para la agente eldense un crecimiento personal y profesional. Lejos de su entorno habitual, enfrentándose a las barreras del idioma y a diferentes concepciones del trabajo policial, Sonia se convirtió en un ejemplo de lo que significa salir de la zona de confort para seguir aprendiendo y representar a toda una institución con orgullo.
“El idioma puede ser un obstáculo, pero también una oportunidad. Cuando estás fuera, entiendes que los valores de respeto, protección y servicio son universales. Es ahí donde te das cuenta de que, por pequeño que parezca tu municipio, lo que haces puede tener un eco enorme”, expresó emocionada al regresar.
Su intervención permitió mostrar el trabajo que desde el Ayuntamiento de Elda y la Policía Local se viene realizando en materia de convivencia escolar, mediación y apoyo a la infancia. Un modelo de seguridad cercano, que combina formación, sensibilidad social y coordinación con la comunidad educativa.
El reconocimiento internacional que esta experiencia ha supuesto confirma que no existen pequeños municipios cuando se trabaja con grandes valores. La labor de Sonia S. Prada en el extranjero refleja la preparación, la vocación y la proyección de una policía local que mira más allá de sus límites territoriales para compartir, aprender y mejorar.
Una puerta abierta al futuro
Desde la Asociación Nacional de Agentes Tutores (ANAT) y desde SeguCITY digital queremos expresar nuestras más sinceras felicitaciones a la agente Sonia S. Prada por su compromiso, valentía y capacidad para representar a toda una profesión con orgullo y excelencia.
Su paso por el programa Erasmus ha dejado claro que la cooperación internacional no solo enriquece a quien participa, sino que fortalece la imagen de la policía local española como modelo de cercanía, mediación y servicio público.
Sonia ha abierto una puerta. Una puerta que otros compañeros y compañeras podrán cruzar en el futuro, llevando consigo un mensaje que trasciende idiomas y fronteras. La verdadera seguridad se construye con empatía, diálogo y humanidad.
