El denominado reglamento de productividad para la Policía Local de Molina de Segura, aprobado recientemente en la Mesa General de Negociación de Empleados Públicos, ha generado posturas enfrentadas entre los sindicatos con representación en el Ayuntamiento. Mientras el equipo de gobierno sostiene que se trata de un acuerdo legal y con respaldo suficiente, los sindicatos SIME y CCOO niegan que exista un reglamento como tal y denuncian incumplimientos en materia de personal.
El Ayuntamiento de Molina de Segura anunció la aprobación de un reglamento de productividad para la Policía Local, cuyo objetivo es incentivar la dedicación de los agentes en turnos festivos, nocturnos y de refuerzo. Desde el equipo de gobierno se asegura que el acuerdo se ha tramitado conforme a la legalidad y que contó con el respaldo de los sindicatos CSIF y UGT, que suman la mayoría de delegados en los órganos de negociación.
El alcalde, José Ángel Alfonso, destacó que esta medida forma parte de un plan más amplio que incluye la incorporación de 17 nuevos agentes en 2025 y la previsión de 15 plazas más en 2026, así como nuevas plazas de mando. El portavoz popular, Fran Hernández, explicó que el acuerdo busca “reconocer el esfuerzo de los agentes y garantizar una mayor presencia policial en las calles”.
Por su parte, los sindicatos SIME y CCOO han emitido comunicados en los que desmienten que exista un reglamento de productividad. Aseguran que únicamente se trata de un acuerdo de dos años, alcanzado fuera de los mecanismos legales y “con pactos extraoficiales”. Además, denuncian que el Ayuntamiento está incumpliendo el Acuerdo Marco, en lo relativo al número mínimo de agentes por turno, lo que, según indican, pone en riesgo la seguridad de los propios policías y de la ciudadanía.
Ambas organizaciones sindicales señalan que están abiertas al diálogo, pero rechazan aceptar condiciones que, en su opinión, no cuentan con el respaldo mayoritario de la plantilla.
Desde el equipo de gobierno, en cambio, se insiste en que el acuerdo “es fruto de un trabajo prolongado de negociación, dentro de los cauces normativos y con la debida transparencia”.
La polémica en torno al nuevo reglamento de productividad refleja una división sindical en el Ayuntamiento de Molina de Segura y anticipa que el debate sobre la organización del servicio policial continuará en los próximos meses.
















