Un taxista mallorquín ha sido acusado de intentar violar a su pasajera británica antes de arrojarla al arcén de la carretera con la ropa rota. La traumatizada turista llamó a sus padres y les pidió que avisaran a la policía antes de ser abandonada por el taxista “semidesnuda” en un aparcamiento vacío, entre la medianoche y la 1 de la madrugada del pasado 15 de septiembre.
La Policía Local de Andratx encontró a la mujer británica llorando tras recibir la alerta de madrugada y la trasladó al Hospital Son Espases de Palma para un reconocimiento médico. Tanto su vestido como su ropa interior estaban rotos cuando los agentes llegaron al aparcamiento de la localidad turística de Camp de Mar, en la costa suroeste de Mallorca.
La Guardia Civil, a través de algunas cámaras de seguridad, consiguió identificar al taxista que la recogió en un restaurante donde había estado comiendo con sus padres antes de quedarse sola, donde fue recogida por el taxista.
La versión del taxista fue que la turista estaba borracha y se subió al asiento delantero de su vehículo desde el asiento trasero, antes de comenzar a coquetear con él mientras la llevaba de regreso a un resort de playa donde ella se hospedaba.
