En el último Congreso Confederal de CC.OO. fue aprobada una resolución, muy aplaudida, en la que el sindicato estableció claras «líneas rojas» en relación a la deriva ultraderechista adoptada en los últimos años por el Sindicato Unificado de Policía (SUP), que cada vez se hace más patente con su alianza con empresas como Desokupa y con las asociaciones profesionales de jueces y fiscales más conservadoras. Cabe destacar que, en sus orígenes, el SUP fue un sindicato de carácter claramente progresista (apoyado por organizaciones similares como la Unión Sindical de Policía Municipal (USPM), la Unión Sindical de Policías y la Plataforma Unitaria de Policías (ambas del extinto Cuerpo Superior de Policía). Aún hoy, el SUP y CC.OO. mantienen unas relaciones privilegiadas, que ahora parecen verse amenazadas por su posicionamiento cada vez más cercano a la ultraderecha. El malestar entre los y las afiliadas de CC.OO. era cada vez más patente.
