Sevilla, fue la sede del Encuentro Nacional de Agentes Tutores 2024. Hace unos días concluía, concretamente los días 14 y 15 de noviembre en el Palacio de Congresos, Fibes. Dichas jornadas son organizadas por la FEMP (Federación Española de Municipios y Provincias) en colaboración con el Plan Nacional sobre Drogas y la Asociación Nacional de Agentes Tutores.
En los últimos años, la presente localidad ha realizado una apuesta firme por la figura de Agentes Tutores de la Policía Local, hasta el punto de que se han convertido en referentes a nivel nacional y este premio de albergar las jornadas era más que merecido, para un grupo especializado a la hora de desempeñar este compromiso y las funciones con los menores.
Encuentros que vienen realizándose con una frecuencia bianual, anteriormente en ciudades como Córdoba, Plasencia y Madrid. La reunión es numerosa debido a las temáticas y ponencias que allí se tratan, además de proceder a la entrega de condecoraciones.
Los números avalan la realización de este tipo de jornadas formativas, ya que de todas las partes de nuestro geografía española se desplazan en un número masivo, como ha sucedido en la presente edición, con una cifra superior a 500 policías.
La ciudad reúne belleza, es una ciudad hermosa y vibrante, con una vida frenética acompañada de su cultura y lugares increíbles que explorar. Sevilla, tiene algo para todos los gustos y allí los profesionales reunidos pudieron no solo disfrutar y aprender con los ponentes de prestigio nacional traídos para la ocasión, sino que las sinergias y relaciones entre los mismos traspasan las barreras profesionales y reducen con esa cercanía la distancia de los kilómetros entre sus ciudades.
Sin duda, las conclusiones y consideraciones para la presente edición son excelentes y ponen un broche de oro a unas jornadas rebosantes de actitud positiva, conocimiento y una perfecta y coordinada combinación en la organización y atención a los presentes.
Sin ninguna duda, “Sevilla tiene un color especial, Sevilla sigue teniendo su duende”.
