La localidad murciana de Torre Pacheco (población de 40.000 habitantes) todavía vive días de elevada tensión social y seguridad reforzada, tras los disturbios desatados a raíz de la brutal agresión sufrida por un vecino de 68 años el pasado miércoles. El ataque, que ha conmocionado a la población, ha desencadenado una oleada de reacciones violentas, manifestaciones no autorizadas convocadas por organizaciones neonazis y ataques con tintes xenófobos y racistas.
Hasta el momento, más de una decena de personas han sido detenidas. Entre los arrestados se encuentran los tres presuntos implicados en la agresión inicial, uno de ellos capturado en Rentería (Guipúzcoa) por la Ertzaintza e ingresado ya en prisión. Se trata de Issam B., con antecedentes por robo con fuerza y, al parecer, sin ninguna vinculación con la localidad de Torre Pacheco. También se desconoce el motivo de la agresión, ya que no hay indicios ni de robo, ni de enemistad personal, por lo que se han generado diversas especulaciones.
La tensión ha escalado desde entonces, y en los días posteriores se han registrado ataques a negocios regentados por ciudadanos de origen magrebí, como el asalto a un local de kebab protagonizado por varios individuos armados con palos.
La Policía Local ha demostrado un nivel de profesionalidad muy destacada y se ha mantenido en primera línea para contener a los violentos, en estrecha colaboración con la Guardia Civil. Por su parte, la benemérita ha intensificado su presencia en la zona, desplegando a más de 130 agentes de unidades antidisturbios con el objetivo de contener la escalada de violencia y garantizar la seguridad de los vecinos.
Los movimientos neonazis han alimentado la violencia
Además, ha sido detenido en Mataró (Barcelona) uno de los supuestos líderes del movimiento xenófobo «Deport Them Now UE», acusado de incitar desde las redes sociales a una «cacería» contra inmigrantes y lanzar numerosos bulos para alimentar la xenofobia, el racismo y la violencia. Los ultras, incluso, han desarrollado un amplio movimiento en las Redes Sociales para acosar a las mujeres emparejadas con inmigrantes, profiriendo graves insultos y amenazas contra ellas.
Desde este martes, y durante al menos tres días consecutivos, se han convocado protestas no autorizadas por grupos ultras en el municipio. Ante este escenario, las fuerzas del orden han cerrado el acceso a la plaza del Ayuntamiento y han desplegado un fuerte operativo que incluye vigilancia permanente y patrullas conjuntas de la Guardia Civil y de la Policía Local. Aunque la participación en estas acciones ilegales ha sido escasa, con apenas un centenar de personas en la calle, han lanzado consignas contra la inmigración, los medios de comunicación y los cuerpos policiales.
A pesar de la crispación social, las autoridades destacan que la actividad diaria del municipio se ha desarrollado con relativa normalidad, gracias al esfuerzo constante de la Guardia Civil y la Policía Local. Su actuación ha sido clave para contener los disturbios y preservar la seguridad ciudadana en un contexto altamente sensible.
Torre Pacheco permanece bajo estricta vigilancia, con un claro objetivo: restablecer la calma y garantizar la convivencia frente a la violencia y el discurso de odio.
















