A finales de junio, agentes de las Policías Local y Nacional de Palma de Mallorca consiguieron desarticular una banda de carteristas de nacionalidad rumana, que se dedicaban a robar a turistas en dicha ciudad. Durante el operativo policial se han detenido a ocho personas, seis hombres y dos mujeres, de edades comprendidas entre los 25 y 38 años de edad. Todos ellos están acusados de un delito de hurto con pertenencia a grupo criminal.
Los agentes observaron la presencia en un concurrido lugar público de un grupo de personas, algunas de ellas conocidas por su historial delictivo. Los funcionarios policiales observaron cómo una pareja del grupo se dirigía a la víctima elegida, una turista, con la que entablaron conversación con la intención de entretenerla. En ese momento apareció en escena una segunda pareja del grupo para llevar a cabo la sustracción. Una de ellas, utilizaba un pañuelo a modo de muleta para entorpecer la visión de la víctima, mientras que su compinche se dedicaba a abrir la riñonera y sustraer la cartera. En ese instante aparecieron otros dos miembros del grupo cuya misión era dar cobertura y ocultar la sustracción, quedando los dos últimos dos integrantes de la banda como vigilantes y apoyo en el caso de que la situación se complicase al ser descubiertos.
Una vez consumada la sustracción uno de los sospechosos se hizo con el dinero el cual ocultó en el interior de su ropa y a continuación arrojó la cartera al suelo. Acto seguido, los ocho integrantes del grupo se dividieron en dos subgrupos y abandonaron el lugar con celeridad. En vista de los hechos, los policías siguieron a los mismos dándole alcance por separado, comprobando cómo el hombre que había sustraído el dinero portaba en el interior de su ropa500 euros en efectivo repartidos en billetes de diferente valor, además de llevar 20 euros en su propia cartera.
Paralelamente se cacheó al resto del grupo, localizando más billetes ocultos en la ropa interior, algunos arrugados, así como en carteras y riñoneras siendo el total del dinero intervenido de 1.385 euros en billetes. También localizaron varias tarjetas SIM que supuestamente suelen ser utilizadas en teléfonos móviles hurtados.