Calahorra (municipio de La Rioja con algo más de 25.000 habitantes) ha comenzado esta semana la instalación de sus primeras 18 cámaras de seguridad ciudadana en nueve puntos estratégicos del casco urbano, tras obtener la autorización de la Delegación del Gobierno en La Rioja.
Estas nuevas unidades se suman a las 21 cámaras de videovigilancia del tráfico ya operativas en accesos y zonas céntricas, y marcan un paso importante hacia el objetivo de mejorar la seguridad en la ciudad.
Las cámaras incorporan tecnología de inteligencia artificial con capacidad de lectura automática de matrículas. Este sistema permite identificar vehículos relacionados con posibles delitos en tiempo real, según explicó el inspector jefe de la Policía Local, Rubén González.
El centro de control, ubicado en las dependencias de la Policía Local, cuenta con un ordenador y dos pantallas para visualizar en directo las imágenes captadas. Estas grabaciones se almacenan y quedan a disposición de los cuerpos policiales.
Los dispositivos se han colocado en varias calles del Casco Antiguo y en otras áreas donde se concentran más incidencias.
La alcaldesa, Mónica Arceiz, ha destacado que esta actuación forma parte del compromiso del Ayuntamiento para seguir reduciendo la tasa de criminalidad. “Con estas nuevas cámaras damos otro paso firme en el camino para lograr una ciudad más segura”, afirmó.
Además de las actuales 39 cámaras (21 de tráfico y 18 de seguridad ciudadana), el Ayuntamiento ha solicitado una subvención a la ADER de 112.052,59 euros para cofinanciar la instalación de 35 cámaras en los cuatro polígonos industriales: Tejerías, La Azucarera, Rifondo y El Recuenco.
También se prevé la licitación, antes de final de año, de unas 60 cámaras adicionales, con el objetivo de superar el centenar de dispositivos repartidos por toda Calahorra.
Estas medidas buscan consolidar un entorno más seguro, facilitar la labor policial y mejorar la percepción de seguridad entre los vecinos.
