La Policía Nacional ha desmantelado en la provincia de Castellón la primera célula terrorista de ideología supremacista blanca y carácter aceleracionista detectada en España. La operación, dirigida por el Juzgado Central de Instrucción número 6 de la Audiencia Nacional, se ha saldado con la detención de tres personas y el ingreso en prisión provisional del presunto líder del grupo.
Los arrestados, de 24, 22 y 48 años de edad, están siendo investigados por su presunta implicación en los delitos de pertenencia a organización terrorista, captación, adoctrinamiento y adiestramiento con fines terroristas, así como por tenencia ilícita de armas. El líder del grupo contaba además con numerosos antecedentes por hechos violentos, por lo que su actividad ya era conocida por los servicios de información debido a su avanzado proceso de radicalización.
Durante los cinco registros realizados en inmuebles de Castellón, los agentes intervinieron nueve armas —dos de ellas de fuego—, munición, más de una veintena de armas blancas, equipamiento táctico de carácter militar, material de entrenamiento paramilitar, documentación de contenido aceleracionista, propaganda neonazi y material de enaltecimiento de otras organizaciones terroristas.
¿Qué significa el carácter “aceleracionista”?
El aceleracionismo es una corriente extremista que defiende el uso sistemático de la violencia para provocar el colapso del sistema democrático, el orden social y las instituciones del Estado, con el objetivo final de imponer un nuevo modelo político basado, en este caso, en la supremacía racial.
Los grupos de carácter aceleracionista no buscan únicamente cometer actos terroristas aislados, sino generar un clima constante de inestabilidad, miedo y enfrentamiento social que acelere la descomposición del sistema desde dentro. Para ello, promueven los atentados selectivos, el sabotaje, la radicalización de nuevos militantes y la creación de pequeñas células autónomas con capacidad operativa.
Conexión directa con la organización internacional ‘The Base’
Las investigaciones han confirmado que la célula desarticulada formaba parte de la estructura internacional de The Base, organización terrorista supremacista fundada en 2018, cuyo objetivo es la preparación de una “guerra racial” a través de atentados dirigidos a desestabilizar las democracias occidentales.
El líder del grupo en España mantenía contacto directo con el fundador de esta organización, quien recientemente había realizado un llamamiento internacional para consolidar las células activas y ejecutar ataques selectivos contra objetivos institucionales.
La investigación se inició a principios de 2025 tras la detección de un individuo en avanzado estado de radicalización. A partir de este primer foco se identificó al resto de integrantes de la célula, que ya se encontraban plenamente integrados en la dinámica operativa del grupo.
Según la información policial, los miembros realizaban entrenamientos tácticos con técnicas paramilitares, difundían propaganda extremista, desarrollaban labores de captación a través de redes sociales y habían manifestado expresamente su disposición a cometer atentados selectivos “para la causa”.
La actuación ha sido desarrollada por la Comisaría General de Información de la Policía Nacional, con el apoyo de la Brigada Provincial de Información de Castellón y la colaboración de EUROPOL, en el marco de la lucha contra el terrorismo y el extremismo violento.
Esta operación representa un hito relevante en la detección y neutralización del terrorismo de extrema derecha en España, y pone de manifiesto la importancia del trabajo de inteligencia, la detección temprana de los procesos de radicalización y la cooperación entre cuerpos policiales para garantizar la seguridad ciudadana.
