El pasado fin de semana se ha desplegado en la zona de locales de hostelería de Ferrol, un operativo de seguridad conjunto de las policías Local y Nacional. Esto se produce después de que en el anterior fin de semana un vecino de la zona hubiera sufrido una agresión por recriminar a unos jóvenes que hacían ruido de madrugada.
Sobre las 5’30 horas de la madrugada del domingo anterior, un hombre de 58 años recrimina a varios jóvenes que estaban haciendo ruido frente a su vivienda, en la zona de locales de hostelería y ocio del centro de la ciudad de Ferrol. Pero éstos, lejos de desistir del bullicio e irse, se enfrentan al vecino y acceden al rellano de su edificio, propinándole una serie de golpes que requirieron su traslado al hospital para recibir atención sanitaria, apreciándosele a posteriori diversos hematomas de consideración en la cara.
En ese primer momento se personaron en el lugar patrullas de la Policía Local y Nacional, aunque no localizaron a los autores por la zona, pero fruto de la investigación en marcha, parece ser que ya están identificados.
Este suceso disparó las alarmas de la inseguridad en la zona de la Magdalena, por lo que este fin de semana, ambas policías realizaron un operativo conjunto de seguridad para prevenir situaciones de conflicto y que no se produzcan más sucesos como el ocurrido.
El operativo se puso en marcha desde las primeras horas nocturnas del viernes y sábado, consistiendo en el reforzamiento de la presencia policial uniformada a pie por esa zona, además de puntos de control policial tanto estáticos como dinámicos.
Apoyo de la Federación Gallega contra la Contaminación Acústica.
Desde esta Federación han mostrado el apoyo al vecino agredido en Ferrol, por recriminar a los jóvenes que estaban haciendo ruido de madrugada. Y aprovechan para reiterar que estas molestias son perjudiciales para los vecinos que las sufren en diversas ciudades de Galicia, por lo que reclaman a la Xunta que con la máxima urgencia modifique la Orden que determina los horarios de apertura y cierre de los establecimientos públicos de ocio. También que los ayuntamientos modifiquen los planes urbanísticos para establecer claramente la incompatibilidad de las zonas de usos residenciales y aquellas donde se desenvuelven actividades molestas.
En el caso de Ferrol, el Alcalde ha indicado que aún no tienen ordenanza que regule la contaminación acústica en el municipio.
