Con paseos de forma aparentemente despreocupada por la playa, en bañador y gorra de beisbol, es como los agentes locales, vigilan para evitar una nueva ola de robos. El incremento de delitos en la playa de Vizcaya más concurrida, es lo que ha obligado a la Policía Local de Getxo a dejar colgados los uniformes en las taquillas e intensificar las patrullas por la arena con gorra y bañador.
Es siempre muy habitual, que la Policía Local de Getxo y sobre todo durante diversos actos como las fiestas Patronales, realicen patrullas de paisano mezclados entre los que disfrutan de ellos, pero no lo es en esta ocasión, que lo hagan entre los bañistas y lo mejor de todo, es que se está demostrando lo efectivo que es tras el número de detenciones realizadas.
Los datos aportados por el Ayuntamiento de Getxo son claros, ya que en las semanas pasadas de este verano, la Policía Local han realizado 108 operativos en la playa. En esta cifra están incluidas las patrullas uniformadas por el paseo de la playa, los aparcamientos y aledaños de la zona playera así como la de los Agentes de incógnito que se mezclan con los bañistas. Hasta el momento, éstos últimos Agentes han podido detener a once personas.
Un Agente femenino y uno masculino, suelen componer las patrullas no uniformadas y normalmente suelen contar con el apoyo de los compañeros que se reparten por los alrededores.
Esta playa no solo es frecuentada por los vecinos del municipio de Getxo (cerca de 76.000 habitantes) ya que también acuden muchos otros del Bilbao metropolitano, debido a la facilidad de trasladarse en metro desde otras muchas localidades, así como utilizando el coche, por disponer de un amplio parking de superficie en el entorno.
Todo ello, el fácil acceso a la playa desde cualquier punto y su extensión, es lo que está originando un aumento de usuarios con el aumento de robos a bañistas, ya que por los datos que mencionan fuentes municipales, otras playas del municipio de Getxo y de otros municipios vizcaínos, no han sufrido esta oleada de robos.
El método de actuación de los amigos de lo ajeno es el de siempre, observan a los más descuidados ya sean personas solas o cuadrillas de amigos y que cuando se van a dar un chapuzón, es cuando los cacos aprovechan a sustraer los objetos tanto de las mochilas como de las bolsas playeras. Ya que en muchas ocasiones se van al agua confiados y sin preocuparse de sus pertenencias. «Las personas mayores y familias están más atentas a sus pertenencias», advierten fuentes policiales. Del número total de denuncias recogidas tanto por la Policía Local como por la Ertzaintza, la Policía Local investiga a 11 personas por estos robos.
Los últimos detenidos fueron a finales de julio, cuando una patrulla local no uniformada, identificó a dos delincuentes por sustraer dinero en metálico a varios adolescentes que se habían ido al agua a bañarse y los cacos se tumbaron en sus toallas para llamar menos la atención y realizar la sustracción del dinero.
Este operativo esta reforzado desde el 1 de junio, tanto por la Policía local como por la Ertzaintza, que han desarrollado cerca de una veintena de controles preventivos para vehículos y personas en el Muelle de Arriluze (zona muy cercana a la playa).
Por lo que comentan los comerciantes cercanos a la zona playera «ya no es extraño cuando vemos a agentes con bañador sacar de la playa a una o varias personas que deben estar al pille y ya en el paseo, los compañeros uniformados y con coches patrulla, les esperan para su identificación o traslado a comisaría. «La verdad es que desde que comenzaron estas patrullas, vemos más policias y sentimos esa sensación de mayor seguridad», comentan los usuarios.
