Cuando se busca reducir la velocidad en las ciudades, normalmente se recurre a radares, badenes o semáforos. Sin embargo, muchas veces estos métodos no logran el efecto deseado, y las personas conductoras siguen poniendo en riesgo la seguridad de peatones y otros vehículos.
En la localidad francesa de Bauné, situada en la región de Maine-et-Loire, se ha implementado un sistema innovador que ha resultado exitoso y se ha viralizado en redes sociales. La idea consiste en pintar líneas onduladas entrelazadas de color blanco sobre el asfalto, generando una ilusión óptica que confunde y alerta a quienes conducen. Este efecto visual lleva a reducir la velocidad para poder mantener la concentración.
Resultados y testimonios
Jean-Charles Prono, presidente de la región, explicó que el objetivo es “dificultar la lectura del paisaje, crear eventos que atraigan la atención del conductor y comunicar lo que sucede en el entorno”. Bauné, con 1.700 habitantes y tres carreteras principales, enfrentaba problemas con el exceso de velocidad, siendo complicado lograr que las señales convencionales tuvieran efecto.
Por su parte, la alcaldesa, Audrey Revereault, afirmó que con esta “perturbación visual” se ha conseguido reducir la velocidad en las calles, cumpliendo el objetivo propuesto y mejorando la seguridad vial en la localidad.
No se ha realizado una investigación científica sobre la eficacia de esta medida.
