El Ayuntamiento de Selva (Mallorca) ha abierto un expediente disciplinario al jefe de la Policía Local por un supuesto caso de acoso a dos mujeres policías, así como un presunto ‘mobbing’ laboral a otro agente, con el que mantenía una serie de diferencias. El acusado, por su parte, niega de forma categórica todas las imputaciones.
El expediente sancionador se inició hace más de diez días, a raíz de la creación de una Comisión de Mediación municipal para solventar un incidente entre el jefe de la policía y un subordinado, relacionado con la compraventa a nivel particular de un coche eléctrico que finalmente no funcionaba correctamente. La comisión está formada por media docena de técnicos de riesgos laborales y funcionarios y se están llevando a cabo una serie de entrevistas con otros policías y testigos, para que aporten la información que poseen sobre los distintos incidentes.
A raíz de la citada comisión, se propuso la apertura de un expediente informativo y desde el consistorio se adoptaron otras medidas cautelares. Una de ellas fue la retirada del arma reglamentaria, hasta que se aclaren los hechos. El alcalde de la localidad, Joan Rotger, fue informado de la situación y de forma inmediata aplicó el protocolo habitual en estos casos. Además, el Ayuntamiento se ha dirigido a la dirección general de Interior del Gobierno Balear, para que nombre un instructor.
Según ha publicado un medio de comunicación local, lo que comenzó como unas pesquisas por una disputa entre un oficial y un agente, ha desembocado ahora en dos presuntos casos de acoso a mujeres policía. Al parecer, la comisión trata de aclarar si hubo insinuaciones de índole sexual durante el servicio en unas fiestas recientes.
En este sentido, las fuentes consultadas han indicado que los denunciantes han aportado una serie de audios y mensajes, tanto en el caso de ‘mobbing’ laboral como en el supuesto acoso íntimo. El jefe de la Policía Local lleva tres años en el cargo y recientemente aprobó las oposiciones. Antes de estar destinado en aquella localidad, estuvo en otros pueblos de la Isla. En la actualidad, la plantilla policial en Selva está formada por siete funcionarios.
El jefe de la Policía Local de Selva no ha sido apartado de momento de sus funciones, pero unas de las primeras medidas cautelares que se ha tomado contra él ha sido la retirada del arma reglamentaria.
El Ayuntamiento también ha informado a la Guardia Civil, por si los hechos pudieran revestir carácter penal.
