Agentes de la Unidad de Radar de la Policía Local de Palma detectaron, en un punto estático de control en una de las avenidas de la ciudad, a una motocicleta de gran cilindrada circulando a una velocidad muy por encima de la permitida en este tramo, limitado a 60 km/h. En concreto, la motocicleta fue captada circulando a 153 km/h en dirección al aeropuerto, duplicando la velocidad máxima permitida.
Esta conducta supone un delito contra la seguridad vial que puede acarrear penas de hasta seis meses de prisión, de hasta doce meses de multa o de hasta noventa días de trabajos en beneficio de la comunidad y, en todo caso, hasta cuatro años de privación del derecho a conducir vehículos a motor y ciclomotores.
Los agentes iniciaron los trámites para localizar e identificar al conductor del vehículo y poner los hechos en conocimiento de la autoridad judicial.